Tus palabras me llevan, son desnudas
palabras que me llaman al color;
como tus girasoles llaman Sol,
con esa fuerza bella voy a ti,
deseando palabras más hermosas.
De las que hieren huye, no las temas,
pero déjalas solas, así: solas…
olvidadas en campo, desterradas
del dialogo, del pensamiento,
y hasta de la punta de tu lápiz.
Mira las que te llenan corazón
como puede ser: sangre, compañera,
honor, dulzura; son como tu vida,
concentran los amores, llegan lejos;
cuando borramos reproches, dolor.
Dolor destiñe, nunca la escribas.
Te llamaré Patricia que me gusta.
Y quiero decirte con palabra
viva, que Él tu padre, siempre mira
lo más hermoso: hija; desde el cielo.
De mí; contarte qué, como aquel
papel abandonado por los suelos,
pisoteado, sucio y manchado,
por minúsculo, corto y baladí;
soy insignificante sin tu beso.
José Pómez
http://www.pomez.net
24 May 2005 en 2:02
Sin palabras….¿se puede decir algo más?